Sin el pan y sin la torta

La imagen borrosa de Velez

Como lo habíamos anticipado en los comentarios anteriores en previa y crónicas de partidos, Velez tuvo su semestre de una experiencia típica, conocida en que la dirigencia no se hará cargo de cómo manejó junto al técnico los dos torneos. Dura derrota ante Banfield, goleado y afuera de toda pelea.

Perder con Banfield no era sorpresa, pero perder goleado ya es una cuestión que lastima. La pregunta es cuanto dura el colchón de un torneo, en el que se suele acostar y pase lo que pase la gloria está ahí nomás y nadie ha de enojarse por las derrotas inmediatamente venideras.
Esta mal pensar así, o no se puede creer que no se puede mantener la hegemonía del juego y seguir el camino del logro consecutivo?
Estar mal pensar que se podría ser inteligentes al momento de elegir, pensando en ventas, en los precios de esas ventas; en el futuro semestre que nos tendrá partícipes de la Copa Libertadores?
Todas estas circunstancias Velez ya las vivió: ya se apostó en varias oportunidades a los dos torneos y quedamos como el título de esta crónica de una muerte anunciada, parafraseando el título de la novela García Márquez, La dirigencia lo sabía o han vivido dentro de un frasco obscuro los últimos veinte años. En el año 1994 se gana la Copa Libertadores y en el torneo se ubica por debajo del decimoquinto lugar. Esto no es una regla, pero ha de tenerse en cuenta. Pasados tantos años, sabiendo que no es posible tener un plantel tan grande en calidad, si en número, pero que en la competencia muestra claramente que no se está a la altura.
El desgaste producido por los dos torneos muestra un final claro, un epilogo de lo que veníamos planteando y la elección que a tiempo no se realizó.
Ahora pereciera que todos tenemos razón y muchos podrán decir que se habla con hecho consumado. Pero cuantas veces pedimos que se eligiera. Que no veíamos a este plantel del mismo modo que el torneo anterior. Que López volvió a ser el López que conocíamos, que la defensa no tenía la seguridad que dio en el Clausura, etcétera. Y como se lo ayudó? Metiéndole más presión, más partidos y así la consecuencia.
Vimos un primer tiempo parejo en el que Velez fue algo más, no mucho más. Tuvo en Díaz la situación más clara de gol que tapo Luchetti, la pelota no le bajaba nunca y cuando sacó el remate el arquero achicó magníficamente, y una de Cristaldo antes que llegó al cierre y su remate da en el palo del lado de afuera luego de un centro razante de Moralez. Banfield solo una que marró Silva de cabeza.
La segunda etapa no da para el mínimo análisis, ya que en trece minutos el Fortín perdía 3-0 y la única posibilidad de gol llegó a los 44 minutos de juego luego de un remate de media distancia que Luchetti desvió al corner. Lo que se dice nada de nada.
Banfield anda derecho, tuvo su cuota de suerte en el primer gol (el remate de Rodriguez pego en la espalda de Díaz y se le desvió a Montoya), después aprovecho que este Velez del Apertura ya no da vuelta resultados, luego del primer gol se cae y si lo apuran logran lo que el Taladro, perforarlo definitivamente.

Banfield: Cristian Lucchetti; Julio Barraza, Sebastián Méndez, Víctor López, Marcelo Bustamante; Marcelo Quinteros, Maximiliano Bustos, Walter Erviti, James Rodríguez; Cristian García y Santiago Silva. Director técnico: Julio César Falcioni.

Vélez: Germán Montoya; Gastón Díaz, Sebastián Domínguez, Nicolás Otamendi, Emiliano Papa; Fabián Cubero, Franco Razzotti, Víctor Zapata; Maximiliano Moralez; Jonathan Cristaldo y Leandro Caruso. Director técnico: Ricardo Gareca.
Goles en el segundo tiempo: a los 20 segundos, Rodríguez (B); a los 3 minutos, García (B) y, a los 13, García (B).
Cambio en el primer tiempo: a los 33 minutos, Roberto Battión (B) por Bustos.
Cambios en el segundo tiempo: a los 6 minutos, Leandro Somoza (V) por Díaz; a los 12, Leandro Zárate (V) por Razzotti; a los 25, Julio Marchant (B) por García y Nicolás Cabrera (V) por Moralez; a los 31, Luis Salmerón (B) por Erviti.
Incidencia en el segundo tiempo: a los 38 minutos, fue expulsado Cubero (V).
Arbitro: Héctor Baldassi.
Cancha: Banfield(muy buen estado)