Velez gano y manda en el torneo Clausura a dos fechas del final. Con goles de Lopez y Morales venció a Newell´s por 2-0. Una multitud colmó el estadio Amalfitani al grito de “Dale Campeón”.
Lo expresábamos en nuestra editorial el pasado sábado al aire y la reprodujimos en está página cuando nos preguntábamos que Velez sería el que enfrentaría a Ñuls.
Apareció entonces, el Fortín que todos queríamos: juego, inteligencia y personalidad para disputar esta instancia del campeonato. Hasta se dio el lujo de jugar lindo para decirle a algún distraído que también puede pisar la pelota si lo desea.
Luego de algunos resultados que en algún momento del torneo dejaron ciertas dudas, estas últimas fechas a fuerza de tesón, contundencia, fútbol y personalidad los hombres de Gareca le fueron dando esa hegemonía de juego a un equipo que solo piensa en su objetivo inmediato y lo cumple: ganar. Sabe que lo único que le sirve es la victoria, porque depende si mismo para lograr el torneo y así lo hizo en las tres fechas jugadas con Boca, Gimnasia jujeño y Ñuls.
Nada lo debe hacer mirar hacia otro lado, como pensar en los resultados de Lanus y Huracán. Saben obviamente que están punteros del torneo y que esa instancia significa estar muy cerca del máximo anhelo de coronarse Campeón, pero ha demostrado que piensa en lo mediato, en arrebatar los tres puntos ante el rival que se le ponga frente a sus aspiraciones.
La hidalguía de un hombre como Otamendi, figura en cada partido hace a su defensa segura secundada por un experimentado Dominguez, combinando así una zaga dura de penetrar, asistida por dos marcadores laterales como Díaz y Papa, aunque ambos con funciones diferentes. El medio juego, con Cubero apareciendo como el carrilero luchador y con técnica por momentos propia de su experiencia, le dan salida por la derecha, marcando la intención de abrir el juego. El doble cinco de Zapata y Razzotti, con uno más de contención y otro más suelto acompañando la ofensiva, caso del chapa, le dan al medio juego esa impronta que hace pensar al adversario por donde pasar o generar su juego. Morales, es ese hombrecito que trepana cabezas de adversarios con su juego corto, su finta traviesa que deja en el camino piernas que tratan de atraparlo cuando tiene el balón. López el gran goleador, ese que exaspera por su pasividad momentánea, porque concreta cuando se pierde otras tantas por su juego cansino y pareciera despreocupado enervarndo a los hinchas que a pesar de todo corean su nacionalidad entre dientes. Y Cristaldo el nene que se equivoca, gambetea, choca, se enoja, pierde, pero siempre va en busca del arco. Un gran jugador al que le falta reconocerse y regalar aún más de su potencial ofensivo.
Ese es el equipo de Gareca, que sabe de su posibilidad cierta de dar la vuelta. Un técnico humilde, sin mascaras, ni posturas genuflexas con el medio o dirigencia, que solo se expresa hablando del trabajo y su resultado.
Es el Velez que le ganó a Ñuls buscando la victoria desde el inicio, sin apabullar, sin doblegar al rival metiéndolo a empujones en su área, no, nada de eso. Esperando su momento, haciendo circular el balón y su idea, desprendiéndose de marcas agresivas para atacar y en conjunto se defiende para cerrarle los caminos al gol a su adversario.
Los hombres de Sencini, hicieron un buen trabajo amparados en la tarea de la defensa, con Spolli y Schiavi sacando todo lo se atreviera a intentar vulnerar a un seguro Peratta (saludado masivamente por la parcialidad velezana que le expresó su cariño a un hombre que se fue sin razones relevantes, típico de una dirigencia poco capaz, que debió recurrir a Bassedas para dejar de hacer estupideces con el fútbol profesional). Gran tarea de Bernardi y Bernardello, aunque el primero dejó a la lepra con uno menos por su típica a esta altura, calentura cada vez que no se le dan los resultados (son muy hinchas a veces los rosarinos, de uno y otro lado, olvidándose de su profesión). Arriba Formica y Da Silva solo tuvieron algún ataque certero, pero que no causó zozobra la defensa velezana. Noche tranquila para Montoya.
Los goles: desborde de Maxi Morales, sin acento ok, sobre la izquierda en la primera etapa, centro al borde del área chica y López, que no había estado preciso hasta allí, concreta el 1-0.
En la segunda etapa el mismo Moralez, poniendo su acento al resultado lógico y final del partido, luego de un rebote o pifia de Schiavi, selló el 2-0 con un remate cruzado y alto, ante un Peratta que nada pudo hacer para detener semejante bombazo.
Maxi Moralez y su noche para decirles a todos que la altura futbolística de Velez pasa por sus pies y los de Otamendi. Defender bien y atacar mejor, armas que Gareca deberá aplomar para las dos finales que se avecinan.
Lo expresábamos en nuestra editorial el pasado sábado al aire y la reprodujimos en está página cuando nos preguntábamos que Velez sería el que enfrentaría a Ñuls.
Apareció entonces, el Fortín que todos queríamos: juego, inteligencia y personalidad para disputar esta instancia del campeonato. Hasta se dio el lujo de jugar lindo para decirle a algún distraído que también puede pisar la pelota si lo desea.
Luego de algunos resultados que en algún momento del torneo dejaron ciertas dudas, estas últimas fechas a fuerza de tesón, contundencia, fútbol y personalidad los hombres de Gareca le fueron dando esa hegemonía de juego a un equipo que solo piensa en su objetivo inmediato y lo cumple: ganar. Sabe que lo único que le sirve es la victoria, porque depende si mismo para lograr el torneo y así lo hizo en las tres fechas jugadas con Boca, Gimnasia jujeño y Ñuls.
Nada lo debe hacer mirar hacia otro lado, como pensar en los resultados de Lanus y Huracán. Saben obviamente que están punteros del torneo y que esa instancia significa estar muy cerca del máximo anhelo de coronarse Campeón, pero ha demostrado que piensa en lo mediato, en arrebatar los tres puntos ante el rival que se le ponga frente a sus aspiraciones.
La hidalguía de un hombre como Otamendi, figura en cada partido hace a su defensa segura secundada por un experimentado Dominguez, combinando así una zaga dura de penetrar, asistida por dos marcadores laterales como Díaz y Papa, aunque ambos con funciones diferentes. El medio juego, con Cubero apareciendo como el carrilero luchador y con técnica por momentos propia de su experiencia, le dan salida por la derecha, marcando la intención de abrir el juego. El doble cinco de Zapata y Razzotti, con uno más de contención y otro más suelto acompañando la ofensiva, caso del chapa, le dan al medio juego esa impronta que hace pensar al adversario por donde pasar o generar su juego. Morales, es ese hombrecito que trepana cabezas de adversarios con su juego corto, su finta traviesa que deja en el camino piernas que tratan de atraparlo cuando tiene el balón. López el gran goleador, ese que exaspera por su pasividad momentánea, porque concreta cuando se pierde otras tantas por su juego cansino y pareciera despreocupado enervarndo a los hinchas que a pesar de todo corean su nacionalidad entre dientes. Y Cristaldo el nene que se equivoca, gambetea, choca, se enoja, pierde, pero siempre va en busca del arco. Un gran jugador al que le falta reconocerse y regalar aún más de su potencial ofensivo.
Ese es el equipo de Gareca, que sabe de su posibilidad cierta de dar la vuelta. Un técnico humilde, sin mascaras, ni posturas genuflexas con el medio o dirigencia, que solo se expresa hablando del trabajo y su resultado.
Es el Velez que le ganó a Ñuls buscando la victoria desde el inicio, sin apabullar, sin doblegar al rival metiéndolo a empujones en su área, no, nada de eso. Esperando su momento, haciendo circular el balón y su idea, desprendiéndose de marcas agresivas para atacar y en conjunto se defiende para cerrarle los caminos al gol a su adversario.
Los hombres de Sencini, hicieron un buen trabajo amparados en la tarea de la defensa, con Spolli y Schiavi sacando todo lo se atreviera a intentar vulnerar a un seguro Peratta (saludado masivamente por la parcialidad velezana que le expresó su cariño a un hombre que se fue sin razones relevantes, típico de una dirigencia poco capaz, que debió recurrir a Bassedas para dejar de hacer estupideces con el fútbol profesional). Gran tarea de Bernardi y Bernardello, aunque el primero dejó a la lepra con uno menos por su típica a esta altura, calentura cada vez que no se le dan los resultados (son muy hinchas a veces los rosarinos, de uno y otro lado, olvidándose de su profesión). Arriba Formica y Da Silva solo tuvieron algún ataque certero, pero que no causó zozobra la defensa velezana. Noche tranquila para Montoya.
Los goles: desborde de Maxi Morales, sin acento ok, sobre la izquierda en la primera etapa, centro al borde del área chica y López, que no había estado preciso hasta allí, concreta el 1-0.
En la segunda etapa el mismo Moralez, poniendo su acento al resultado lógico y final del partido, luego de un rebote o pifia de Schiavi, selló el 2-0 con un remate cruzado y alto, ante un Peratta que nada pudo hacer para detener semejante bombazo.
Maxi Moralez y su noche para decirles a todos que la altura futbolística de Velez pasa por sus pies y los de Otamendi. Defender bien y atacar mejor, armas que Gareca deberá aplomar para las dos finales que se avecinan.
SINTESIS
Vélez: Montoya; Gastón Díaz, Sebastián Domínguez, Otamendi, Papa; Cubero, Razzotti, Zapata, Moralez; Cristaldo, López. DT: Ricardo Gareca.
Ñuls: Peratta; Spolli, Schiavi, Insaurralde; Pillud, Bernardi, Bernardello, Vangioni; Sperdutti; Formica, Da Silva. DT: Roberto Sensini.
Goles: López al los 40 PT y Moralez a los 11 del ST.
Cambios: Velazquez, Larrivey y Nani por Moralez, López y Cristaldo.
Nuls terminó con seis amonestados y un expulsado, Bernardi. Arbitro: Javier Collado No tuvo inconvenientes, pero estuvo flojo a la hora de las amarillas. Como todos tratan de sacar los partidos. Cancha: Vélez ( muy buena
Vélez: Montoya; Gastón Díaz, Sebastián Domínguez, Otamendi, Papa; Cubero, Razzotti, Zapata, Moralez; Cristaldo, López. DT: Ricardo Gareca.
Ñuls: Peratta; Spolli, Schiavi, Insaurralde; Pillud, Bernardi, Bernardello, Vangioni; Sperdutti; Formica, Da Silva. DT: Roberto Sensini.
Goles: López al los 40 PT y Moralez a los 11 del ST.
Cambios: Velazquez, Larrivey y Nani por Moralez, López y Cristaldo.
Nuls terminó con seis amonestados y un expulsado, Bernardi. Arbitro: Javier Collado No tuvo inconvenientes, pero estuvo flojo a la hora de las amarillas. Como todos tratan de sacar los partidos. Cancha: Vélez ( muy buena
Reserva: Velez 0 Ñuls 1
Es cierto inteligente debe ser Velez en esta última parte del torneo. Que capo Otamendi, che y no le peguen tanto a Lopez que por algo es el goleador. Aldo dejate de joder...Saludos
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